
Rembrandt, «lección de anatomía del Dr. Nicolaes Tulp», 1632
Hoy me he levantado con el pie izquierdo. Es una forma coloquial de decir que todo lo que podría haber salido mal ha salido como esperaba: mal. Y esos días, en que todo sale mal, es cuando la cabeza no para de darle vueltas a todo tipo de ideas que terminan aflorando en forma de enfado. Irracional, pero enfado. ¿Cómo puedo enfadarme por algo que no afecta -a priori- directamente?. Es una cuestión de honor, de un tipo de honor difuso, que no llego a comprender del todo, pero al fin y al cabo, ¿Quién se comprende a si mismo?. Yo, desde luego, no.